
A medio camino entre una actividad deportiva y un método de meditación, la práctica del yoga cautiva a quien la ejercita, todos los asiduos afirman que les ha cambiado la vida. ¿Lo mejor? La progresión en los movimientos la marcas tú y guiada por un buen maestro que mida las posibilidades de cada uno, es una disciplina para todos los públicos, de 0 a 90 años. ¿Por qué no probar algo que se puede realizar en cualquier lugar y cuyos beneficios holísticos están sobradamente avalados por la ciencia? Respira hondo y lee con atención todo lo que el Yoga puede hacer por ti.
Reduce la ansiedad y el estrés. Según un estudio realizado Ronald C. Kessler, sociólogo y profesor en el Harvard Medical School de Massachusetts, la practica habitual del yoga disminuye el estado de ansiedad y el estrés de manera similar al de una terapia médica convencional ( aquello de tomar ansiolíticos)
Aumenta la calidad del sueño y ayuda a dormir mejor. Otro estudio realizado por la Fundación para la investigación del Yoga Swami Vivekananda demostró que las personas que realizaban yoga tardaban 10 minutos menos de media en quedarse dormidas, e incrementaron el número de horas que dormían en un promedio de una hora más por noche. Además, expresaban la sensación de estar más descansadas por la mañana.
Se trabaja mejor. Si tu trabajo te agota, no te gusta o te mueves en un hábitat laboral muy competitivo, el yoga puede ayudarte a salir del atolladero sin cambiar de trabajo. De nuevo otro estudio hindú que analiza cinco indicadores del rendimiento laboral (satisfacción, compromiso, resultados, implicación emocional y relaciones sociales con los compañeros) ha demostrado que los beneficios del yoga se apreciaban para el trabajador en cuatro de los cinco puntos analizados, solamente el nivel de compromiso quedó exento de sus bondades.
En los niños y estudiantes, mejora el rendimiento académico y la atención. La atención a la respiración y la meditación que se incluye en la práctica del yoga, hacen posible alcanzar un estado mental más sereno, alejando nervios y estrés ante la presión de los estudios y mejorando el rendimiento. O lo que es lo mismo, estudiar menos y aprender más y más rápido. Mejor una hora de yoga que una noche en blanco a base de café para superar un examen, una oposición, una entrevista laboral,….
Fortalece huesos y músculos….¡Y sin agujetas! Si se realiza de manera progresiva y adaptada, el yoga evita que el ácido láctico se acumule en el cuerpo, además de reforzar los huesos evitando la pérdida de masa ósea y potenciar la flexibilidad de las articulaciones. Un gran antídoto natural contra la osteoporosis, por ejemplo.
Aumenta la flexibilidad. A pesar de que al principio las posturas parezcan propias de un contorsionista, a medida que se avanza en su práctica, el yoga contribuye a potenciar la flexibilidad muscular. Cruzar las piernas en la postura del loto te resultará un juego de niños, y te servirá como plataforma para practicar tu deporte favorito evitando en gran medida el riesgo de lesiones.